Lima, 26 mar (EFE).- El delantero peruano Paolo Guerrero, jugador del Internacional de Porto Alegre, consiguió este martes que se abra un proceso penal contra el abogado del hotel donde supuestamente tomó accidentalmente restos de un mate de coca que le hicieron dar positivo por dopaje y pasar catorce meses suspendido.
Guerrero estuvo presente en la audiencia judicial donde el magistrado Arturo Zapata, del 29 Juzgado Penal de Reos Libres de Lima, ordenó procesar al letrado del Swissotel Jaime Durand por los presuntos delitos de falsedad genérica y contra la fe pública.
El capitán de la selección peruana denunció a Durand por presuntamente haber mentido a la Agencia Mundial Antidopaje en las informaciones que remitió al organismo sobre las circunstancias ocurridas aparentemente en el interior del hotel que condujeron al dopaje de Guerrero.
En su denuncia, el futbolista asegura que el abogado mintió al decir que la sala del hotel donde tomó el té era pública para cualquier visitante del hotel y que cualquiera podía entrar e ingresar comida, refrescos e incluso bebidas alcohólicas.
Guerrero sostiene que esta área era de uso exclusivo de la selección peruana para recibir a sus familiares y amigos, por lo que el hotel estaba obligado a ofrecer en ese lugar únicamente los productos indicados por la Federación Peruana de Fútbol (FPF).
Allí el delantero tomó un anís que supuestamente tenía restos de un mate de coca, por lo que tras el partido del 5 de octubre ante la selección de Argentina en Buenos Aires fue sometido a un control antidopaje donde dio positivo por benzoilecgonina, conocido por ser el principal metabolito de la cocaína.
Inicialmente la FIFA lo sancionó con una suspensión de un año, que después fue rebajada a seis meses tras la apelación del futbolista.
Sin embargo, el jugador acudió al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de Suiza para obtener la total absolución, pero el máximo órgano de justicia deportiva lo sancionó con catorce meses de suspensión.
Solo un recurso extraordinario en el Tribunal Federal de Suiza le permitió a Guerrero obtener una suspensión cautelar del castigo para poder disputar con la selección peruana el Mundial de Rusia 2018, donde anotó un gol ante Australia.
La sanción de Guerrero concluye el 5 de abril, momento en el que quedará habilitado nuevamente para jugar en el Inter de Porto Alegre y con la selección peruana.
Guerrero consideró que las falsedades del abogado del hotel le causaron «un daño material moral, profesional y psicológico», así como una afectación a su reputación.
El peruano destacó que la sanción por dopaje le provocó que el Flamengo le rescindiese el contrato, así como empresas privadas que le cancelaron hasta diez contratos de publicidad.
Debido al avance de las investigaciones en este caso, el juez dio a la Fiscalía un plazo de 90 días para que formule la denuncia penal con todos los indicios y declaraciones, lo que servirá al magistrado para determinar si merece llevar el asunto a un juicio.
Tagged with: abogado dopaje Guerrero hotel juzgados