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Una vez que Edison Flores convirtió el penal definitivo que eliminó a Uruguay de la Copa América, y le permitió a Perú clasificar a las semifinales, todos los integrantes de la Blanquirroja celebraron al máximo el triunfo.
Sin embargo, alguien no festejó totalmente la victoria angustiosa de Perú. Y ese deportista fue Pedro Gallese, quien se erigió como figura del compromiso al atajarle un penal clave a Luis Suárez, en el inicio de la tanda.
Si bien es cierto, Pedro Gallese abrazó y felicitó al ‘Orejas’, al igual que el resto, por su convicción a la hora de lanzar el penal final. Pero luego se dio un breve espacio para acercarse al ‘9’ de Uruguay con la finalidad de transmitirle fortaleza y serenidad.
«Después de la alegría que sentimos para alcanzar la siguiente fase, me acerqué a él para tratar de consolarlo. Sabía lo que estaba sintiendo él, porque yo había sentido eso», dijo Pedro Gallese en una extensa entrevista a El Comercio.
El arquero incaico contó también que se vio reflejado en Luis Suárez. «No pasé por lo que es dejar a mi país fuera de la Copa América, pero sentía que lo que le sucedió lo viví contra Brasil en la fase de grupos».
«Lo único que se me vino a la mente fue decirle que es un ganador, un gran profesional. Que esto solamente iba a ser una piedra en su gran carrera; que siga para adelante y que piense en su familia», reveló el guardameta con más paradas en la Copa América.
Pedro Gallese, con ese noble gesto, demostró ser un grandioso ser humano con virtudes fascinantes. A él no le importa los elogios por sus intervenciones o las felicitaciones por penales atajados, solamente le interesa quedar bien como persona en todo ámbito.
En mi corta carrera siempre trato de dejar una buena imagen, de que los rivales con los que me enfrento no hablen mal de mí y siempre dejar algo así tipo que ‘Pedro es un gran rival al que es difícil hacerle goles, pero al que enfrentarlo da gusto'», sentenció.
Fuente: El Comercio
